Una mirada a la recuperación de la psicosis posparto desde la óptica de las mujeres y las familias
Una revisión sistemática y metasintésis (o metaanálisis cualitativo) británica sobre el proceso de recuperación de la psicosis posparto desde el punto de vista de las mujeres afectadas y sus familias, revela la complejidad de este proceso de recuperación y la necesidad de implementar intervenciones psicológicas, psicosociales y farmacológicas que se incluyan en un plan de recuperación a largo plazo.
¿Qué es la psicosis posparto?
La psicosis posparto es uno de los trastornos mentales más severos que pueden aparecer después de dar a luz. Afecta entre 0,89 y 2,6 de cada 1.000 mujeres y se caracteriza por una instauración brusca y por un empeoramiento rápido. Aparecen síntomas como alucinaciones, delirios, comportamiento desorganizado y depresión. La descompensación psicopatológica sostenida se asocia a resultados adversos como la ideación suicida o un vínculo madre-bebé alterado. Asimismo, resulta de gran importancia la detección precoz de esta patología, ya que se recomienda encarecidamente la derivación inmediata al servicio de salud mental de referencia para hacer la evaluación correspondiente. Siguiendo el mismo hilo, el tratamiento de elección para este tipo de casos es la hospitalización de la díada en una unidad madre-bebé, y casi siempre es necesario instaurar tratamiento farmacológico. Del mismo modo, la familia se incluye en la intervención, puesto que se encarga del cuidado de la madre y del bebé, así como de la planificación y cumplimiento del tratamiento. Con un tratamiento adecuado los síntomas más graves suelen mejorar en 2-12 semanas.
Tal y cómo se ha mencionado anteriormente, a pesar de se recomiendan intervenciones psicológicas y psicosociales en los casos de psicosis posparto, se sabe poco acerca de los factores psicológicos que explican la recuperación o los tipos de intervenciones eficaces. Por este motivo, el presente estudio plantea dos objetivos principales: 1) sintetizar las experiencias reportadas de psicosis posparto desde el punto de vista de las mujeres y de las familias, y 2) identificar los factores implicados en el proceso de recuperación.
La metodología
Para la obtención de los estudios incluidos en la metasíntesis se consultaron cinco bases de datos: CINAHL, MEDLINE, EMBASE, PsychINFO y Web of Science. Introduciendo las palabras clave de búsqueda se encontraron un total de 1.782 estudios de los que después de revisar el título, abstract y los criterios de inclusión/exclusión se incluyeron 15 en el análisis.
Los resultados
Mediante los 15 estudios incluidos en la metasíntesis se han reportado las experiencias de recuperación de una psicosis posparto de 103 mujeres y 42 familiares, de los cuales 32 eran las parejas de las mujeres. Las participantes se encontraban en diferentes momentos temporales del proceso de recuperación, desde los 2 meses posparto a los 32 años.
Los hallazgos expuestos se conceptualizaron en cuatro temas principales y trece subtemas, representando las experiencias reportadas de psicosis posparto y los factores involucrados en la recuperación desde la perspectiva de las mujeres y de las familias. A partir de los temas y subtemas que se expondrán a continuación, se construyó un modelo que demuestra que las mujeres no siguen una progresión lineal en la recuperación (de hecho, a menudo se observan movimientos hacia atrás y hacia adelante entre las fases), la cual se debe enmarcar en un contexto social más amplio.
Tema 1: experimentar lo inexplicable
Durante los estadios iniciales de a psicosis posparto las mujeres explicaron pasar por un “shock”, el cual se conceptualizó como algo inexplicable.
- Atrapada en una mente enferma: en esta fase las mujeres experimentaron pensamientos altamente estresantes, así como percepciones inusuales. El miedo a dañar al bebé o a que éste les sea arrebatado, llevó a las mujeres a desconfiar de sus seres más cercanos y a esconder los síntomas, lo que contribuyó a la demora en la búsqueda de ayuda profesional.
- Sensación de miedo y desesperanza: muchas de ellas describieron esta experiencia como traumática, aterradora y abrumadora. Esta sensación de miedo se vio exacerbada cuando la mujer ingresó en el hospital, interpretando así que fue separada y aislada de su familia. Además, ellas mismas refirieron sentimientos de pérdida de control sobre la situación, así como miedo a no mejorar.
- “De la nada”: este subtema hace referencia a la aparición inesperada y brusca de la psicosis posparto. Las propias mujeres explicaron que no disponer de información prenatal sobre este trastorno dificultó la tarea de comprender qué les estaba sucediendo. A modo de entender qué estaba pasando, muchas mujeres y familias atribuyeron el diagnóstico a causas biológicas que implican un desequilibrio hormonal y a factores relacionados con el embarazo, como alteraciones del sueño o una experiencia de parto traumática. Esta conceptualización ayudó a las mujeres y a las familias a comprender la psicosis posparto como un trastorno específico del parto que le puede ocurrir a cualquiera y de esta manera se atribuía a una causa externa y reducía los sentimientos de culpa.
- Dificultad para cuidar del bebé y vincularse a él: en la fase inicial de la psicosis posparto, muchas mujeres reportaron un aumento de la ansiedad, una disminución de la confianza y dificultades a la hora de establecer el vínculo con los bebés. En consecuencia, las mujeres acabaron delegando el cuidado de su bebé a otros miembros de la familia, así como al personal de enfermería. Finalmente, cuando la mujer y el recién nacido ingresaron en la unidad madre-bebé, la familia apuntó sentirse aliviada, ya que consideraron que la díada estaría segura y cuidada.
Tema 2: pérdida y ruptura
En esta segunda fase, las mujeres y las familias reportaron una sensación de pérdida y ruptura que afectó a diferentes áreas de la vida y permaneció hasta la remisión de los síntomas psicóticos agudos.
- Desafío a la autoidentidad: las experiencias asociadas a la fase aguda de la psicosis posparto suponen un desafío para el sentido del yo y la propia identidad. Durante esta fase, las mujeres no se identificaron con su comportamiento habitual, como si estuvieran fuera de lugar, lo que les provocó emociones de pérdida, abandono y miedo al futuro. Estas emociones permanecieron con ellas más allá de la recuperación y las mujeres creían que habían experimentado un cambio que probablemente era permanente, el cual requería aceptación.
- Culpabilidad por habérselo perdido: con el paso del tiempo, las mujeres indicaron tener la sensación de haberse perdido los primeros meses de la vida de su hijo/a, además de las preocupaciones sobre cómo este suceso puede impactar en el desarrollo del bebé. Muchas mujeres y sus parejas describieron haberse sentido culpables y decepcionados, como resultado de no haber cumplido las expectativas de maternidad y paternidad. Es más, una consecuencia de este suceso fue que algunas parejas decidieron no tener más descendencia por el aumento del riesgo de volver a pasar por un episodio de psicosis posparto.
- Impotencia: en las primeras etapas, las mujeres dependían de la familia, los amigos y el personal sanitario para obtener información y apoyo. No obstante, a medida que el tiempo iba pasando, describieron sentirse indefensas y desamparadas.
Tema 3: alinear el viejo yo y el nuevo yo
La recuperación se conceptualizó como un proceso largo, en el que las mujeres tuvieron que adquirir consciencia de sus experiencias e integrarlas, así como identificar la fortaleza personal y adaptarse a una nueva visión del yo, integrada en el contexto de la maternidad.
- Un proceso no lineal: en la recuperación, descrita como un proceso positivo, pero no lineal, las mujeres llegaron a reportar períodos en los que predominaban la ansiedad, la incertidumbre sobre el futuro, el bajo estado de ánimo y la depresión, que en algunos casos podía llevar a la progenitora una nueva hospitalización en la unidad madre-bebé.
- Desarrollo de la consciencia e integración de la experiencia: la habilidad de las mujeres para revelar sus experiencias se consideró como un paso importante para la recuperación. Con el objetivo de comprender por qué habían pasado por una psicosis posparto, muchas de ellas intentaron organizar los sucesos estresantes que les habían ocurrido a lo largo del tiempo para buscar información sobre el trastorno. Además, poder desarrollar consciencia y compartir esta experiencia resultó importante para reforzar los sentimientos de esperanza y disminuir la emoción de culpa.
- El retorno a la vida: en este punto de la tercera fase las mujeres identificaron experiencias positivas, como conectar con otras mujeres y vincularse con el bebé, las cuales contribuyeron a establecer el sentimiento de autoeficacia. En este sentido, volvieron a valorar a las personas más cercanas a ellas, reportaron mayor empatía y se mostraron más motivadas para ayudar a los demás. Finalmente, cabe destacar que estos cambios mejoraron sus relaciones interpersonales.
Tema 4: contexto social
El contexto social, conceptualizado como un elemento integrador, influenció la experiencia de recuperación de las mujeres afectadas.
- Las relaciones familiares, “una espada de doble filo”: durante todo el proceso de recuperación, las mujeres valoraron el apoyo prestado por su familia, aunque simultáneamente también estaban preocupadas por su bienestar. El apoyo psicológico a las familias fue necesario para ayudarlas a comprender la psicosis posparto y para indicarles estrategias para lidiar con el miedo en torno a una recaída.
- Interacción con los profesionales sanitarios: las interacciones con los servicios sanitarios fueron percibidas al mismo tiempo como un agente facilitador y cómo una barrera para la recuperación. A pesar de que hubo mujeres que hicieron una valoración positiva de los servicios sanitarios y consideraron que estos las ayudó a mejorar su autoconfianza, la relación con el bebé y con la familia, las hay que consideraron que les resultó difícil acceder a este apoyo y que había una notable falta de coordinación entre los servicios sanitarios y comunitarios, al mismo tiempo que no se reconocieron sus necesidades y llegaron a sentirse juzgadas.
- Expectativas sociales de la maternidad: tanto las mujeres como las familias destacaron la falta de comprensión de esta enfermedad oculta, la cual se suele confundir con depresión posparto. Asimismo, la falta de concienciación por parte de los profesionales dificultó que las afectadas pudieran buscar y obtener apoyo, lo que contribuyó a que las mujeres sintieran que sus síntomas habían sido minimizados.
Enlaces utilizados para la elaboración de la noticia:
Forde, R., Peters, S. & Wittkowski, A. (2020). Recovery from postpartum psychosis: a systematic review and metasynthesis of women’s and families experiences. Archives of Women’s Mental Helath 23, 597-612. doi: 10.1007/s00737-020-01025-z