El suicidio y el infanticidio son las complicaciones más graves que puede tener la enfermedad mental de la madre en este período.
En los casos de infanticidio, las mujeres son consideradas y condenadas como criminales, en lugar de pacientes afectadas por una enfermedad mental grave y necesitadas de cuidado y de tratamiento. Queremos conseguir que nuestros gobiernos destinen más fondos e inviertan en recursos para la prevención, la detección, el tratamiento y la creación de dispositivos específicos para la recuperación de los trastornos mentales perinatales y paliar los efectos que éstos tienen a corto y largo plazo sobre las propias madres, sus hijos/as y sus familias.